Los apartamentos impecables, però es un auténtico laberinto, nos dieron un alojamiento muy apartado, con gran cantidad de escaleras de subida a veces, de bajada otras, y no siempre bien indicado, todo menos decirnos que girando la calle habia una puerta lateral que daba justo enfrente del apartento asignado. Nos dieron una llave por si después queriamos salir "por atràs", sin más explicaciones ni advertirnos de las interminables escaleras. Al final esa puerta de atrás era la que daba directamente en nuestro apartamento. Ibamos con dos maletas grandes y yo tengo 68 años. Hubiera sido todo un detalle que el hombre que habia en recepción nos hubiera dado mejor información.
El hotel no dispone de parquing pero la información que da hoteles.com es que si tieme