Estancia segura, cumpliendo con todas las medidas de seguridad frente al covid-19.
El personal muy agradable, pero queríamos destacar al socorrista de la piscina Alfred, muy profesional y amable, siempre dispuesto ayudar. A parte de guardar nuestra seguridad, se encargaba de desinfectar todas las hamacas cada vez que alguien se iba y siempre con la mascarilla puesta, pese al calor insoportable que hemos tenido toda la semana.
Lo único malo que diría es la comodidad de la cama. Hacía mucho ruido al moverse y no se descansa a gusto.